¡Prepárate para una noche de humor sin censura con Cristian Quintero y su show de stand-up comedy "Don Aborrecido"!

La madre de Rosario y de Ana vuelve al solar de los mangos a trasegar un pasado tan dulce como los árboles frutales que solía disfrutar, pero tan amargo como las muertes violentas que ocurrieron en su familia. En su recorrido, entre alegre y melancólico por el lugar que la vio nacer y crecer, rememora frutos de mil sabores, árboles multiformes y músicas de cuerdas y de pájaros. Evoca a aquellos que quizás murieron por no renunciar a su terruño y recuerda a sus dos hijas que, aunque lejos, sabe que pronto se le unirán en el lugar que ya no es y nunca será como antes. A través de estas tres mujeres, Orlando Cajamarca hace un breve resumen de muchas de las dolencias que han afectado no solo al Valle del Cauca, sino a Colombia en los últimos 50 años.

Dos hombres llegan a un pueblo de “mala muerte” y uno de ellos es confundido con un inspector que fue enviado desde la capital para fiscalizar la manera de cómo se están manejando los establecimientos públicos. A partir de este momento, todos, empezando por el alcalde y sus funcionarios, harán hasta lo imposible para impresionar al insigne visitante. Al final, ninguno se escapa de pagar un precio alto por su estupidez.